Una de las últimas tendencias en medicina estética es la bichectomía. Con esta técnica, se consigue afinar y estilizar el rostro.
Esta técnica es una de las más demandadas entre las personas que se dedican al mundo de la belleza. Sus grandes resultados, su simplicidad de ejecución y su sencillo postoperatorio están consiguiendo que esta intervención se convierta en una de las principales alternativas para mejorar el aspecto de tu rostro.
¿En qué consiste la bichectomía?
Las bolas de Bichat (o bolas de grasa bucal) son unas estructuras de tejido adiposos situadas debajo de las mejillas.
La bichectomía consiste en una intervención quirúrgica mediante la cual se extraen estas bolas de grasa, reduciendo el volumen existente en los laterales del sector inferior de la cara.
La intervención tiene un tiempo estimado de realización de 40 minutos y consiste en realizar dos pequeñas incisiones en la parte interna de las mejillas mediante las cuales se extraen estas bolsas de grasa.
Debido a que los cortes se realizan en el interior de la boca, no quedan cicatrices visibles en el rostro, por lo que los resultados son muy estéticos.
¿Para quién está indicada la bichectomía?
Este tratamiento se recomienda a personas delgadas, pero con una cara de aspecto redondeado, que quieran afinar su rostro.
Hay que tener en cuenta que para pacientes de edad avanzada o con excesiva flacidez no es recomendable esta intervención. En cualquier caso, siempre será el doctor especialista el que deba recomendar este tratamiento.
Cuidados postoperatorios.
Tras la intervención se colocará en la zona una venda compresora que se mantendrá durante unas horas. También puede aplicarse frio sobre las mejillas para ayudar al proceso desinflamatorio y será también aconsejable dormir con la parte superior del cuerpo más elevada de lo habitual.
La alimentación también deberá cuidarse durante unos días, siendo al principio solo líquida y pasando a ser blanda tras un corto periodo de tiempo que dependerá de la evolución de la lesión.
Beneficios de este tratamiento
Una de las grandes ventajas es que la bichectomía no necesita de un periodo de reposo, por lo que el paciente puede retomar una vida prácticamente normal de inmediato y volver a sus rutinas habituales tras un periodo corto de tiempo.
Los resultados son visibles prácticamente desde el mismo día de la intervención y resultan altamente estéticos.
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